miércoles, 1 de abril de 2009

En estos circos romanos ¿Qué festejamos?
Se trata solo de una faena de matadero. En esta lucha, una decena de carniceros matarán a golpes a un inocente animal.
¿Qué tienen en contra mia estos hombres? ¿Qué les he hecho para que me ataquen de esta manera? ¿Cuándo acabará este suplicio? ¿Qué delito cometí para tener un final asì?
... Esto pasa por la mente del toro, este animal tan noble que hasta hace poco pastaba libre y vivia en paz ...
Se trata de una lucha desigual en la que uno de los rivales está seguro que va a ganar y el otro que va a morir, no se trata de una cuestión de cobardía o valentía, sino de falta de sentido, porque el torero está ahí por su propia voluntad, por dinero. Pero al toro nadie le ha preguntado si quiere estar ahí
Mi simpatía esta del lado del toro y del caballo y todo mi desprecio y odio se dirige hacia el hombre. No sufro en absoluto cuando el autor de estas muertes infames es herido y lloro cuando veo al caballo arrastrando sus entrañas por la arena, lloro cuando el toro escupe su alma luchadora entre bocanadas de sangre.

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